Leyendas de Baja California Sur
mayo 19, 2022
Comondú, BCS. En este estado el desbordante imaginar popular ha permitido la creación relatos fantásticos que hoy día hacen parte de su rica tradición cultural y cuya difusión ha sido alimentada por la generosa candidez de su gente.
1. LA VIDENTE:
Hace ya mucho tiempo en la comunidad de El Triunfo, vivía una pequeña y solitaria niña pelirroja de aspecto y presencia sobrecogedora. La niña había nacido con un don, sus ojos podían mirar el futuro. La conocían como la vidente de El Triunfo.
Su vida era triste, la gente la excluía, era una rechazada. No podía jugar con los demás niños, pues le temían. Se pensaba que la niña, más que una vidente era un ente del mal, implicado en las tragedias que predecía. La niña era un alma solitaria, pero eso cambió cuando llegó él.
Así una amistad surgió mágica entre los dos niños. Una amistad que creció día con día. Era como si el destino los tuviera preparado, esos fueron los días más felices para la niña.
Todo estaba bien hasta ese día...
Una visión llegó a la niña, su amigo estaba marcado, moriría pronto. La visión llegaba una y otra vez a la niña, alterándola como ninguna otra. En ella podía ver la iglesia del pueblo incendiándose y a su amigo devorado por las llamas.
La niña intentó advertirle a la gente, pero nadie quiso escuchar. Su amigo intentó tranquilizarla, convencerla de que su visión había sido sólo un mal sueño.
Pero el destino estaba marcado, el incendio de la iglesia ocurrió. El niño y su madre estaban en la iglesia limpiando, el incendio fue súbito. La vidente llegó tarde, poco antes que la gente del pueblo.
La multitud estaba histérica, furiosa, llenos de rabia culpaban a la niña por lo sucedido, la llamaban bruja. La pequeña corrió a su casa a refugiarse de la muchedumbre.
La familia se abrazó fuerte por última vez. Los pobladores, locos de ira prendieron fuego a la casa y al final, la niña vidente pudo estar con su amigo nuevamente.
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